lunes, 24 de febrero de 2014

7 consejos para elegir la calefacción de tu vivienda

Os ofrecemos algunas interesantes ideas a tener en cuenta para elegir el sistema de calefacción que mejor se adapte a nuestra vivienda, bien sea una vivienda individual o formando parte de un bloque. El objetivo de la calefacción es satisfacer las necesidades de confort, con el menor consumo de energía posible y las menores emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.

Casi la mitad de la energía que gastan los hogares españoles es para calentar la vivienda: El 46%, según el IDAE en 2007, frente al 13% que se emplea en aparatos eléctricos y electrodomésticos. Este valor varía dependiendo de la zona climática en la que se ubica la vivienda, la orientación, la calidad de la construcción, el nivel de aislamiento y los hábitos de sus habitantes. 






1.    Antes de calentar hay que aislar: 

El calor se escapa por paredes, ventanas, suelos y techos. Por ello, cuanto mejor aislada esté la vivienda, menos energía dejaremos escapar en invierno al exterior. La base del ahorro en climatización es un buen aislamiento. 

En las ventanas, los sistemas de doble acristalamiento con cámara de aire reducen casi a la mitad la pérdida de calor respecto al vidrio sencillo.

Pequeñas mejoras en el aislamiento como una capa de 3cm de corcho, fibra de vidrio o poliuretano, pueden conllevar ahorros energéticos de hasta un 30% en calefacción.  




2.    Cual es la calefacción más económica 

Si hacemos una comparativa entre los diferentes combustibles que se emplean en calefacción podemos observar que la energía eléctrica que se emplea en radiadores eléctricos es la más cara: alrededor de 0,15€/kWh ya que por cada kWh térmico necesitamos un kwh de electricidad. Este coste se reduce en el caso de la bomba de calor con energía eléctrica porque tiene rendimientos de hasta el 300%, pero no sirve para climas interiores fríos porque en los días de invierno el sistema pierde rendimiento.

Con el gas natural se consiguen costes más reducidos, en torno al 0,06€/kwh. En comparación con el gasóleo (0,09€/kWh), el gas natural es una energía más limpia y barata, que llega canalizada a la vivienda y no necesita ser almacenada ni recargada periódicamente (actualmente el 28% de los hogares en España disfruta de gas natural).

El puesto de honor lo ocupa la biomasa con un coste actual en torno a 0,04€/kwh. No todos los hogares pueden instalar este tipo de calefacción y seguramente se encarezca en los próximos años, pero a día de hoy es el combustible más barato.






3.    ¿Sigue siendo rentable la tarifa de acumulación nocturna
  
La tarifa con discriminación horaria (14 horas de noche) o de acumulación nocturna (8 horas de noche) se basa en calentar un material refractario, que acumula el calor y lo desprende lentamente. Existen varios sistemas como el suelo radiante eléctrico, que se coloca bajo una capa de hormigón, o los acumuladores eléctricos de pared, que se colocan junto a las ventanas y que almacenan el calor mediante resistencias eléctricas (Efecto Joule). El calor se produce y almacena durante la noche, que es más barato, y es liberado a lo largo del día. 

Los acumuladores eléctricos son recomendables en viviendas de climas templados que sólo necesitan un aporte de calor ciertos días al año y durante algunas horas al día. La tarifa de discriminación horaria dura de diez de la noche a doce de la mañana, por tanto desde las 12 empieza a liberar el calor.

En general, los sistemas eléctricos de calefacción, como los radiadores portátiles de aceite, son los menos recomendables desde el punto de vista energético porque sus rendimientos son mucho más bajos que los demás sistemas, porque el precio de la electricidad no para de aumentar cada año y porque su producción y transporte es más contaminante que otras alternativas. (En torno a 0,1 €/kWh en la tarifa nocturna) 












suelo radiante eléctrico. fuente:www.confortycalor.com 

 4.    El mito de la calefacción individual 

Algunas personas prefieren elegir viviendas con calefacción individual a la hora de alquilar un piso, porque creen que es un sistema más cómodo que te otorga libertad para elegir cuándo encender y apagar la calefacción. Sin embargo los sistemas centralizados resultan ser más eficientes que las calderas individuales porque necesitan menos combustible para calentar el mismo volumen de agua ya que se concentra en un mismo depósito. Por tanto, es preferible una vivienda con calefacción central porque consume menos energía, sin embargo sólo el 10% de los hogares en España emplea este sistema.

5. Que caldera es más eficiente 

Desde el 1 de enero de 2010 todas las calderas han de ser estancas, es decir, la entrada de aire y la evacuación de gases tienen lugar en una cámara cerrada sin contacto alguno con el aire del local (mediante una chimenea que sale a la fachada) Se puede elegir una caldera estanca convencional o bien apostar por otras de eficiencia superior como las calderas de baja temperatura y las calderas de condensación.

Las calderas de baja temperatura trabajan con temperaturas de retorno del agua de entre 40 y 60ºC por tanto emplean menos energía que las convencionales, lo que supone un ahorro en la factura de combustible.

Las calderas de condensación recuperan parte del calor que se pierde durante la combustión al producirse vapor de agua. En el resto de calderas este calor se pierde por la expulsión de gases. Su temperatura oscila entre 30 y 50ºC alcanzando rendimientos superiores al resto de calderas y consumiendo menos energía. En conclusión se podría decir que la caldera de combustión con combustible de gas natural es la más eficiente y más económica y es menos contaminante que el gasóleo o la electricidad.



6.    Por qué tarda en salir el agua caliente 

Cuando al abrir el grifo de la ducha tarda unos minutos en salir el agua caliente se está perdiendo agua cada vez que se realiza esta acción. Esto es debido a que el sistema de calentamiento del agua se realiza de manera instantánea, es decir, el agua fría pasa a través de una resistencia eléctrica que va calentando el agua a medida que es demandada. Este sistema es menos eficiente que las calderas con acumulación de agua, ya que se desperdicia agua hasta que sale caliente y se enciende y apaga la caldera cada vez que se utiliza.





7.    Alternativas ecológicas: Solar, biomasa y geotermia 

En viviendas dentro de bloques es más difícil la implantación de energías alternativas para calefacción puesto que necesitan en primer lugar el consenso de todos los vecinos y en segundo lugar espacio disponible para sus instalaciones.

Si la vivienda es unifamiliar y tiene espacio suficiente es posible el empleo de fuentes de energía renovables:

En el caso de la energía solar es necesario disponer de una superficie orientada al sur para poder realizar la captación solar. Normalmente se colocan en las cubiertas o terrazas de los edificios aunque también es posible colocarlas en el jardín.


Para las calderas de biomasa, como el pellet o la leña, será necesaria una reserva de espacio para la caldera y para el depósito de combustible.


La geotermia aprovecha el calor presente en las capas superficiales de la Tierra para calentar el agua que llega a los emisores de calor de la casa (radiadores o suelo radiante) Requiere una importante inversión inicial tanto si se hace una excavación de un pozo como si se emplea el calor superficial a poca profundidad. En cualquier caso se necesita cierta cantidad de espacio libre en la parcela para poder acometer estas instalaciones. 


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